jueves, enero 21, 2010

Caminar sobre hielo y fuego

los documentales de Werner Herzog.

Del Viernes 22 de enero al jueves 4 de febrero

Sala Leopoldo Lugones del Teatro San Martín

"Uno no puede preguntar realmente ¿Qué es la verdad? Lo mejor que puede hacer es aproximarse a una respuesta. Ni un matemático, ni un filósofo pueden responder esa pregunta. Es la búsqueda de esa respuesta, la necesidad de encontrarla lo que le da una razón a nuestra existencia. La verdad no puede ser capturada, no puede ser descripta completamente, y aún así debemos tratar de hacerlo. Hay algo dentro del corazón humano, dentro de su alma, que anhela este conocimiento y trata de entender el mundo como es, aún habiendo tantas preguntas que permanecen sin responder. Nosotros, como cineastas, solo en pocos momentos podemos dirigir a la audiencia a un lugar donde pueda observar la verdad de una forma más profunda, como si fuera extática, y a experimentar momentos de iluminación.”
Werner Herzog

Algunos recomendados:

Fata Morgana ( Alemania, 1968-1970)
Fata Morgana podría ser descripto como un documental sobre el Sahara, al haber sido rodadas allí la mayor parte de las secuencias. Pero la narración que lo acompaña, en su mayor parte extraída del Popol Vuh, el libro sagrado de los indios quichés, sugiere una parábola abstracta en torno a la vida del hombre sobre la tierra.
“El desierto es un paisaje en trance, o si se quiere, no es tampoco un paisaje, sino el sueño de un paisaje, su transformación en algo que antes no se había visto aún, la imagen nueva o la realidad vista de modo nuevo, traspuesta, verdadera, pero también fruto de la pesadilla, la realidad de la fata morgana” (W.H.).
Viernes 22 a las 14.30, 18 y 21 horas (Duración total: 84’)

La rueda del tiempo

La rueda del tiempo forma parte de una serie de documentales que Herzog ha realizado sobre temáticas religiosas en los que explora la paradoja del viaje espiritual a través de una travesía física. En esta ocasión, Herzog sigue el peregrinaje hacia la construcción de un mandala de arena budista, una imagen que será borrada una vez que termine el ritual. “Llegué hasta allí como un extranjero sin ningún conocimiento profundo del Budismo. Todavía tengo grandes carencias para entenderlo aunque pienso que da igual. Siento una curiosidad física respecto a la espiritualidad y espero haberla podido trasmitir a través de una película” (W.H.).
Lunes 25 a a las 14.30, 18 y 21 horas (80’).