Hoy leí....
Por primera vez leo una ponencia en público, leo un texto con el que tengo una afinidad, como diría Barthes, cercana al goce, pero que seguramente tiene falencias académicas.
Es raro esto.
No el leer, sino el esperar cosas que no pasan.
Gente que vino a escuchar que uno nunca pensó que iba a venir, gente que no vino, gente a la que le pedí que no viniera, promesas que sólo se vuelven palabras.
Pero hay frases que resuenan en mi cabeza, golpecitos suaves que en este momento se suceden como en forma maquínica:
No se si ...
Todo tiene que ver con todo...
No me digas algo y después no lo hagas...
Tengo la cabeza quemada de estar durante dos días escuchando ponencias, todas interesantes, algunas más, algunas menos.
Quiero destacar en particular a Elsita Ducaroff, yo ya la respetaba como crítica pero ahora merece mi respeto como persona, pensadora, intelectual o como se le quiera llamar. Restará leer su obra a ver si gana mi respeto como escritora.
Uno entra a los blogs y generalmente suele leer críticas negativas de las intervenciones de los intelectuales en el campo cultural. Hoy yo quiero hacer una positiva, que para mí siempre es más difícil porque usualmente uno tiene menos para decir.
Me parece una decisión admirable la de llevar a cabo este encuentro, la forma en que fue planeada, organizada, el hecho de que la instancia de la lectura fuera abierta, que hubiese comentadores, talleres con posibilidad de discusión, gente de otras provincias, etc.
Si nos constituye el otro y cómo somos mirados por ese otro no puede ser que en la sociedad en que vivimos falten instancias dialógicas.
Entonces lo que más rescato de hoy es esa posibilidad de diálogo, esa instancia de escucha de lo que tiene que decir el otro, sea quien sea el otro.
Mi cabeza ahora da vueltas con un proyecto: toma forma lentamente en el aire, pero confío en que dadas ciertas circunstancias se puede llegar a materializar. No importa cuáles sean las condiciones de posibilidad del surgimiento del mismo (copyright Foucault, para seguir a tono con el Encuentro), pero hay veces que las cosas se dan simplemente porque uno quiere que se den.
Aunque suene cursi esta frase. Aunque parezca Coelho.
En mi caso el motor pulsional se constituye por un simple tener ganas.
Es raro esto.
No el leer, sino el esperar cosas que no pasan.
Gente que vino a escuchar que uno nunca pensó que iba a venir, gente que no vino, gente a la que le pedí que no viniera, promesas que sólo se vuelven palabras.
Pero hay frases que resuenan en mi cabeza, golpecitos suaves que en este momento se suceden como en forma maquínica:
No se si ...
Todo tiene que ver con todo...
No me digas algo y después no lo hagas...
Tengo la cabeza quemada de estar durante dos días escuchando ponencias, todas interesantes, algunas más, algunas menos.
Quiero destacar en particular a Elsita Ducaroff, yo ya la respetaba como crítica pero ahora merece mi respeto como persona, pensadora, intelectual o como se le quiera llamar. Restará leer su obra a ver si gana mi respeto como escritora.
Uno entra a los blogs y generalmente suele leer críticas negativas de las intervenciones de los intelectuales en el campo cultural. Hoy yo quiero hacer una positiva, que para mí siempre es más difícil porque usualmente uno tiene menos para decir.
Me parece una decisión admirable la de llevar a cabo este encuentro, la forma en que fue planeada, organizada, el hecho de que la instancia de la lectura fuera abierta, que hubiese comentadores, talleres con posibilidad de discusión, gente de otras provincias, etc.
Si nos constituye el otro y cómo somos mirados por ese otro no puede ser que en la sociedad en que vivimos falten instancias dialógicas.
Entonces lo que más rescato de hoy es esa posibilidad de diálogo, esa instancia de escucha de lo que tiene que decir el otro, sea quien sea el otro.
Mi cabeza ahora da vueltas con un proyecto: toma forma lentamente en el aire, pero confío en que dadas ciertas circunstancias se puede llegar a materializar. No importa cuáles sean las condiciones de posibilidad del surgimiento del mismo (copyright Foucault, para seguir a tono con el Encuentro), pero hay veces que las cosas se dan simplemente porque uno quiere que se den.
Aunque suene cursi esta frase. Aunque parezca Coelho.
En mi caso el motor pulsional se constituye por un simple tener ganas.
8 Comments:
Felicitaciones!
Aunque no pude ir a escuchar ninguna ponencia, me alegra mucho que ese tipo de eventos se realicen.
Tu trabajo estuvo bueno, yo estaba en el público y lo disfruté.
Prometo que iré a la próxima lectura tuya del próximo encuentro.
Por suerte están las ponencias en el link que nos pasaste.
Espero que hoy hayas podido descansar.
Besos, que tengas una buena semana.
Lu.
Gracias pmg.....
a pesar de q no estaba de acuerdo con todo lo q dijiste como comentador de ducaroff, me pareción muy interesante tu intervención y ciertas opiniones que diste
Lu: si, por suerte descansé...Como terminó la fiesta? Cuando estaba bajando por el ascensor me encontré un par de personalidades conocidas, jajaajja
a veces más lejos,
a veces más de cerca.. brindo por este, tu nuevo año, y también el que se viene, que traiga para vos aun más satisfacciones.
Nu: Con B. nos quedamos un rato más, hasta que fuimos muy pocos, todos se fueron de repente, al mismo tiempo que usted o minutos antes/después.
Me intriga lo de las personalidades conocidas, quienes serán?
slds
No puedo creér que te sigo hablando de usted.
Es muy bueno ver que hay un círculo de jóvenes reuniéndose e interesándose por las letras. Ahora...no habría que encontrar la manera de ampliar este círculo? Beso Y FELICITACIONES!
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